Por José R. Torrico GumucioEn un momento donde el tema ambiental debe ser el centro de la temática y de los nuevos planteamientos humanos, en varios países las personas se aprestan a celebrar una festividad conocida como San Juan.
La fiesta de San Juan
Durante esta fiesta las personas solían reunirse con familiares o amigos al rededor de una fogata (hoguera). En las ciudades grandes de Bolivia, en años pasados, el humo producido por quienes aún hacen fogatas ha llegado a límites extremos. Este humo llega a causar baja visibilidad de apenas unas decenas de metros y tarda varios días en disiparse. Las líneas aéreas han tenido que suspender sus vuelos en años pasados durante la mañana siguiente a esta festividad porque la poca visibilidad que se tiene a causa del humo no permite la operación aérea. A esto se suma el uso indiscriminado de cientos de miles de fuegos artificiales y no falta algún "oportuno" que aprovecha esta excusa para quemar basura, ropa vieja o llantas viejas en desuso. Todo durante la misma noche. Las personas parecen perder la conciencia y, como niños haciendo una travesura, encienden cuanto fuego pueden hacer.
La tradición como excusa
Las personas que participan de esta festividad encienden fogatas, fuegos artificiales y otras cosas que tiene a la mano. Suelen justificar esta barbarie ecológica que se repite año tras año diciendo que se trata de una tradición. La publicidad de los medios televisivos incentiva la compra de ciertos productos, relacionados con esta fiesta. En los años recientes esta publicidad comercial evita mostrar gente bailando al rededor de fogatas, pero ocasionalmente dejan sutilmente escapar alguna referencia al uso de fuegos artificiales asociado a la festividad. Todos los años los municipios de las principales ciudades amenazan con sancionar a quienes participan o hacen fogatas en esta noche. La excusa de la tradición lleva a muchas personas a realizar fogatas y encender los fuegos artificiales en los jardines de sus casas para evadir al control de las autoridades. Bomberos y policías luchan infructuosamente por apagar las fogatas, simplemente el humo inunda hora tras hora el aire de las ciudades. Hace unos años escuché a un señor decir que solía encender una fogata solo por ir contra la norma del municipio (¿A quien dañaba ese señor con su actitud?). Con esperanza debo admitir que en los últimos años he observado que el humo es menor cada año, sin embargo es algo que se puede evitar completamente.
La falta de información
En Bolivia mucha gente aún cree que San Juan es una fiesta Boliviana y que tiene relación con los días mas fríos del año, los cuales generalmente ocurren por estas fechas. Algunos creen que se relaciona con algún santo, por el nombre "San Juan". Las primeras celebraciones de esta festividad se realizaban en épocas pre-cristianas[1] al sur de España, donde encendían fogatas en las playas para celebrar el día mas largo del año (o la noche mas corta), pues en el hemisferio norte del planeta es pleno verano.
Las sociedades evolucionadas descartarán las tradiciones absurdas
Debemos ser capaces de comprender el momento histórico que nos toca vivir. El planeta no es un ente inerte el cual el ser humano puede dañar y reparar a su antojo. Mientras científicos y gobernantes tratan de delinear las políticas correctas para salvar al medio ambiente, cada segundo que pasa, se destruyen irreversiblemente hectáreas de selva, se asesinan especies animales, se producen daños a la salud de las personas por la contaminación producida por nosotros mismos. Si no hay un cambio consciente de actitud de las personas que habitan el planeta solo estamos viendo una humanidad que se dirige hacia su propia autodestrucción.
Debemos ser capaces de deshacernos conscientemente de toda tradición o hábito que nos lleve absurdamente a repetir eventos que pronto calificaremos como "bárbaros", como irracionales, como irresponsables. Tenemos que tomar consciencia que la humanidad es parte de este planeta y no dueña de el, que nuestra vida depende de un planeta sano y limpio. Debemos ser capaces de vernos como una especie inteligente, que habita un planeta y que tiene la necesidad de preservar la vida de todas las especies que habitan el planeta, mientras desarrollamos la tecnología y el conocimiento que nos permitirá explorar el universo en búsqueda de otras formas de vida y de otros planetas donde la vida es posible.
Por ello, pienso y reafirmo, que la absurda fiesta de San Juan debe ser eliminada de las tradiciones de los pueblos porque no son sanas: aceleran el calentamiento global, intoxican los pulmones de las personas que habitan las ciudades y son un legado del pasado colonial que no tiene justificativo alguno en el actuar de las sociedades evolucionadas del futuro donde el ser humano es consiente de si mismo, de su dependencia del medio ambiente y de la fragilidad del ecosistema del planeta. Creo que los medios de comunicación masiva deben ceder gradualmente espacios suficientes de difusión para crear consciencia planetaria. Es importante generar políticas de información en colegios, universidades y sociedades sobre temas medioambientales. De esta forma aportaremos a lograr la consciencia global que necesita la humanidad para poder dar el siguiente paso evolutivo consciente.
Debemos ser capaces de deshacernos conscientemente de toda tradición o hábito que nos lleve absurdamente a repetir eventos que pronto calificaremos como "bárbaros", como irracionales, como irresponsables. Tenemos que tomar consciencia que la humanidad es parte de este planeta y no dueña de el, que nuestra vida depende de un planeta sano y limpio. Debemos ser capaces de vernos como una especie inteligente, que habita un planeta y que tiene la necesidad de preservar la vida de todas las especies que habitan el planeta, mientras desarrollamos la tecnología y el conocimiento que nos permitirá explorar el universo en búsqueda de otras formas de vida y de otros planetas donde la vida es posible.
Por ello, pienso y reafirmo, que la absurda fiesta de San Juan debe ser eliminada de las tradiciones de los pueblos porque no son sanas: aceleran el calentamiento global, intoxican los pulmones de las personas que habitan las ciudades y son un legado del pasado colonial que no tiene justificativo alguno en el actuar de las sociedades evolucionadas del futuro donde el ser humano es consiente de si mismo, de su dependencia del medio ambiente y de la fragilidad del ecosistema del planeta. Creo que los medios de comunicación masiva deben ceder gradualmente espacios suficientes de difusión para crear consciencia planetaria. Es importante generar políticas de información en colegios, universidades y sociedades sobre temas medioambientales. De esta forma aportaremos a lograr la consciencia global que necesita la humanidad para poder dar el siguiente paso evolutivo consciente.
[1] Referencias en la WEB:
http://www.escuelai.com/spanish_culture/fiestas_espanolas/sanjuan.html
http://nochedesanjuan.yaia.com/historia.html
http://evolucion-bolivia.blogspot.com/
